Como hacer jabón para ropa en pastilla con aceite de oliva reciclado

Como ya hemos visto anteriormente un método para limpiar el aceite usado para luego aprovecharlo haciendo jabón de uso doméstico, hoy os voy a enseñar a convertir el aceite usado en un estupendo jabón quitamanchas para la ropa. La fórmula contiene un porcentaje de sosa suelta, por lo que no es apta para las ropas más delicadas, pero nos dejará los trapos de la cocina como si fueran nuevos, incluso para las que tenéis cocina de carbón y como yo andáis buscando una solución para conseguir una mejor limpieza en vuestros rodillos.

Materiales que vamos a necesitar:

Una olla para calentar el aceite (también lo podemos calentar al baño maría en la jarra en la que vayamos a mezclar luego todo)

Una jarra de plástico duro o cristal para mezclar la sosa con el agua

Otra jarra para mezclar el aceite con la disolución de sosa

Utensilios para remover: una cuchara de madera o espátulas de silicona, no usar nunca elementos de hierro o aluminio

Una báscula de cocina de precisión

Los elementos de protección habituales: guantes, mascarilla... (podéis verlos todos aquí)

Leer el artículo de recomendaciones y medidas de seguridad 

Fórmula para hacer jabón quitamanchas en pastilla con aceite de oliva reciclado:

• 1000 g de aceite de oliva reciclado
• 171 g de sosa caústica
• 400 g de agua

Esta fórmula tiene un sobreengrasado negativo del -25%, lo que quiere decir que un 25% del peso total de la sosa que diluimos en el agua no se saponifica (no se mezcla con los aceites) y queda suelta en el jabón por lo que no es apto para usar sobre la piel, siendo muy recomendable usar guantes a la hora de frotar las manchas de la ropa. La concentración de la lejía será del 30% así nos ayudará con el hollín, la grasa y otras manchas difíciles que se suelen encontrar en los paños de cocina.

Lo primero que haremos será preparar todo lo necesario para hacer el jabón (puedes ver los útiles recomendados para elaborar jabón en esta entrada: Herramientas necesarias para hacer jabón casero). Tras prepararlo todo, ponte los guantes, gafas y demás artículos de protección para evitar inconvenientes.

Después iremos pesando los ingredientes por separado:

• Primero el aceite, pesamos los 1000 g y lo dejamos preparado para más tarde calentar a fuego muy suave, necesitaremos una temperatura de entre 40 y 50 grados para mezclar con la sosa.

• Pesaremos los 400 g de agua en un recipiente más alto que ancho, una jarra de plástico resistente al microondas será un lugar ideal. Si es de las primeras veces que hacéis jabón os recomiendo usar agua destilada o de mineralización muy débil.

• Por último pesaremos 171 g de sosa caustica, yo la peso siempre a parte en un cacharrito de plástico.

Ahora prepararemos la disolución de sosa. Cogeremos una de nuestras espátulas de silicona (o madera) e iremos añadiendo poco a poco las perlas de sosa sobre el agua mientras revolvemos suavemente para no salpicar. Poco a poco notaremos como el agua va cogiendo temperatura.

El número de abajo del termómetro marca 83 ºC, la temperatura de la disolución.

Debemos esperar que baje la temperatura de la sosa lo suficiente para poder mezclar con los aceites, esto llevará su tiempo, lo ideal es una temperatura entre 40/50 grados centígrados.

Cuando tengamos el aceite y la sosa dentro del rango de los 40º - 50º podemos ir echando poco a poco la disolución de sosa sobre el aceite mientras remueves despacio con la espátula de silicona o la cuchara de mandera.

Verter con cuidado la disolución sobre los aceites

Recuerda remover despacio y ten puestos los guantes, la ropa de trabajo y las gafas para evitar quemaduras o manchas en la ropa no deseadas.

Removiendo manualmente la mezcla

Veras que la mezcla cambia de color y se aclara, puedes alternar la mezcla manual con la batidora eléctrica, pero no es recomendable abusar, pues si solo removemos con la batidora puede que nos queden las zonas de los bordes sin mezclar como es debido, así que lo mejor es intercalar la espátula con la batidora.

Removiendo con la batidora a baja potencia

Ten la batidora siempre por debajo de la mezcla para evitar que entre exceso de aire (por la formación de burbujas) y también para evitar salpicaduras. Según va cambiando de color la mezcla ve subiendo poco a poco la potencia, pero siempre con cuidado; recuerda también que las batidoras eléctricas no deben estar más de un par de minutos encendidas, pues puedes quemar el motor,

Removiendo manualmente de nuevo

Poco a poco la mezcla irá cogiendo un color blanquecino, debes seguir removiendo hasta que obtengas la traza del jabón.

La traza del jabón es una consistencia semisólida que nos avisa que el jabón está listo para poner en el molde. Es parecido a cuando cocinas natillas o crema pastelera, la densidad de la mezcla se vuelve tal que permite hacer dibujos sobre la superficie con la misma mezcla sin que esta baje al fondo. Puedes ver la traza en la siguiente imagen animada:

Traza del jabón

Sabes que la traza dej jabón está lista cuando es posible hacer dibujitos sobre la superficie del jabón sin que este se hunda al fondo. No todas las trazas son iguales, si entre los ingredientes tenemos mantecas, ceras o aceites sólidos la traza será mucho más fuerte que la superior.


Ahora vierte la mezcla en los moldes y tápalos con papel de film y una manta vieja para ayudar a conservar el calor. Espera 24 horas como mínimo para desmoldar y cortar el jabón para su posterior secado y curación.

En el caso del jabón para uso doméstico no es obligatoria la espera de curación completa, pero sí recomendable, ya que cuanto más curado esté este, mejores resultados obtendremos.

No olvidéis poneros guantes para usar este jabón, ya que la proporción de sosa suelta nos puede resecar e irritar la piel.